Por más que buscaba y rebuscaba, no lograba encontrar este título dentro de la bibliografía de Rider Haggard. Lógico, si tenemos en cuenta que el título original es Morning star...
Por lo demás, una obra corrientita. Se deja leer, y mete menos morralla filosófica que en Ayesha. Pero está muy lejos del nivel de entretenimiento de Las minas del rey Salomón...
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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