Cuando un alto cargo del Partido Popular ha dicho este fin de semana que no hay que excluir una intervención y que tampoco sería el apocalipsis, mi primer pensamiento fue ya está, tenemos la intervención encima. El segundo fue una fortísima sensación de déjà vu, que me retrotrajo a hace un cuarto de siglo (o más), cuando cierto verano González y Solchaga proclamaban que no devaluarían la peseta. Inevitablemente, cada vez que lo decían, nuestra anterior moneda era indefectiblemente devaluada.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario