Soy monárquico. No borbonista, ni juancarlista. Suelo decir que soy monárquico a pesar de quien ocupa la institución, no gracias a él. Sólo eso me permite, en ciertas ocasiones, seguir considerando que la Monarquía es la menos mala de las formas de jefatura del Estado para España.
En ocasiones como la que ha ocurrido este fin de semana, por ejemplo: España está fatal, los mercados internacionales nos están dando hasta en el carnet de identidad, su nieto mayor se pega un tiro en el pie, él tiene cerca de tres cuartos de siglo y ha salido no hace demasiado de una lesión... y todo lo que se le ocurre es largarse a cazar a Bostwana. Por mucho que respete a Su Majestad, creo que imbécil es lo menos que puede llamársele... y creo también que, sin desearle mal alguno, se ha buscado bastante a conciencia el romperse la cadera.
A quién se le ocurre...
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario