Probablemente, el afamado economista Cándido Méndez no entenderá jamás por
qué, si cuando jalean a los sindicalistas que al término de las manifestaciones
contra el Gobierno (y no a favor de los trabajadores, como proclaman) gritan
aquello de y ahora a tomar cerveza y a
vivir, no fue jaleado sino increpado duramente cuando, en un ejercicio de
coherencia que le honra (por lo infrecuente de encontrar coherencia en los
sedicentes líderes sindicales,
empezando por Méndez, siguiendo por Tojo y acabando por todos los demás), al
acabar la última manifestación se fue… a tomar unas cañas. Y todavía tuvo la desfachatez
de decir que estaban trabajando.
Señor… ¿sabrá acaso lo que significa ese verbo?
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
2 comentarios:
Es lo que tiene el ir en coche oficial a las manifestaciones. Que para hacer algo de esfuerzo y que los músculos no se atrofien, nada como el levantamiento de vidrio.
Estimado CHCD: deberé confiar en sus afirmaciones, puesto que yo:
a) no concurro a manifestaciones
b) no bebo cerveza
c) bebo tan deprisa el líquido refrescante que apenas me da tiempo a hacer ejercicio...
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