…por mucho que el progretariado se pueda empeñar en decir que sí.
Sectario es el actual rector de la Complutense, como sectario era su padre, el genocida de Paracuellos. Con la
colocación de un monumento a las Brigadas Internacionales, el rector Carrillo
dio muestras de su sectarismo. Podría alegar que las Brigadas Internacionales
vinieron a España a luchar por la democracia (el si la Segunda República
española era una verdadera democracia o no es harina de otro costal), pero no
hay que olvidar quién estaba detrás de las Brigadas (y del apoyo al bando rojo
en nuestra Guerra Civil): Iosif Vissarionovich Dzhugashvili, Stalin. Uno de los
tres grandes genocidas del siglo XX si atendemos a las cifras absolutas (los
otros dos serían Hitler y Mao).
Utilizando la línea de razonamiento del progretariado, la División Azul
resultaba, al menos, tan respetable como las Brigadas Internacionales. No luchaban
por el nacionalsocialismo alemán,
sino contra el bolchevismo soviético.
Bueno, a lo que iba, que me desvío del tema.
Resulta que los tribunales de justicia han dado al Rectorado de la Complutense
un plazo de dos meses para que retiren el monumento a las citadas Brigadas. Y las
razones, repito, no son políticas en absoluto, sino todo lo contrario. Son puramente
administrativas. El rector se saltó los trámites preceptivos y colocó el
monumento sin licencia. El típico respeto a la Ley de la izquierda…
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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