A propósito de ese talante manirroto del que hablaba ayer, resulta que Álvarez Cascos ha decidido eliminar trescientos coches oficiales y mil líneas de teléfono móvil de la administración autonómica… lo que quiere decir que aún hay más.
¿En qué clase de país vivimos que una autonomía uniprovincial (y no Madrid, precisamente) tiene semejante flota de vehículos y de líneas de móvil?
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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