Malacostumbrados a considerarse el
ombligo del mundo y a pensar que sus irracionales demandas serán siempre
atendidas y nunca tendrán consecuencias negativas (para ellos, claro),
probablemente los necionanistas
catalanes se hayan sorprendido cuando Standard & Poors ha rebajado a la categoría de bono basura la calificación de Cataluña, tras su petición de ayuda al Gobierno de España
anunciando que no aceptará condiciones de ninguna clase.
En realidad, y por una vez, las
agencias de calificación han acertado de pleno: las obligaciones reconocidas
por la Generalidad catalana no valen ni el papel en el que están escritas.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
2 comentarios:
Desgraciadamente y por simple interes partidista terminaremos pagando esos bonos todos y cada uno de los ciudadanos de a pie con independencia del valor real del bono, que como bien apuntas es inexistente. CHCD.
Estimado CHCD:
...e incluso negativo
Publicar un comentario