Un conocido mío, que sin temor a equivocarme demasiado puedo afirmar que se declararía a sí mismo como rojo y ateo, ha compartido en Facebook la siguiente foto del Papa:
El pie de foto es el siguiente: El Santísimo Padre Benedicto XVI de joven era muy travieso, aquí le vemos a punto de matar a una pobre mosca.
Evidentemente (o, al menos, evidentemente para mí) el autor del pie de foto (probablemente no mi conocido) pretendía hacer un chiste a costa de la presunta militancia nazi de Joseph Ratzinger. Sin embargo, es un intento bastante torpe, por las siguientes razones (sin ánimo de ser exhaustivos, que diría César Vidal):
1) Ratzinger lleva vestiduras eclesiásticas, por lo que está celebrando algún tipo de ceremonia religiosa. El saludo nazi en ningún caso sería admisible en dicha ceremonia.
2) La foto está convenientemente cortada para que no aparezca el brazo izquierdo. Brazo que, con casi absoluta seguridad, está en la misma posición que el derecho, por lo que Ratzinger estaría haciendo algún tipo de bendición.
Como comenté en Facebook, con críticas de ese nivel no es de extrañar que la Iglesia Católica haya perdurado más de dos milenios.
Y es que algunos, al pasarse de rojos, deberían terminar colorados… Por otra parte, no acabo de entender la puñetera manía que tienen los que se declaran ateos de meterse en la vida interna de la Iglesia Católica. O lo entiendo demasiado bien: el hecho de que no se imniscuyan en la vida interna de otras confesiones religiosas (singularmente, la musulmana) demuestra que lo que son es, en realidad, pura y simplemente anticatólicos.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario