El comunismo, así en general, es una
ideología esencialmente antidemocrática. El español, en eso, no se diferencia
del concepto general. De hecho, como la izquierda toda, sólo sigue las reglas
del juego democrático cuando conviene a sus intereses (que diría Paulino
Iglesias)… o cuando no tienen otro remedio. Pero rasca un poco el barniz de
cualquier comunista y te aparecerá el antidemócrata que lleva dentro: por
ejemplo, Cayo Lara diciendo que van a conseguir en la calle lo que no consiguen
en el parlamento.
Por ello, no me extrañó lo más mínimo leer la
noticia de que presos de ETA (banda terrorista de ultraizquierda, al fin y al cabo) habían enviado una carta pidiendo ayuda a Izquierda Unida de Andalucía y agradeciéndoles el interés brindado. Si eso no se aproxima peligrosamente a colaboración con
banda armada…
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario