Cada vez que veo que los partidos de izmierda se escinden (ah,
afortunadamente, los tiempos en los que era la derecha la que se encontraba
atomizada están cada vez más lejanos), me acuerdo de una canción de La Trinca en la que, a base de mantener
las esencias ideológicas, el sector auténtico de la derecha y de la
izquierda quedaba reducido a una persona por ideología.
La última la ha protagonizado Ernesto Maragall,
hermano del que fue presidente sedicioso de la Generalidad con el PSOE. Harto
de la tibieza de las posiciones socialistas en Cataluña, ha decidido abandonar el PSC para fundar un nuevo partido independentista. Pues nada, con un poco de
suerte les enseñan la puerta de salida… o se van con Laporta al grupo mixto,
que tanto da.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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