lunes, 29 de diciembre de 2014

Ni es broma ni tiene gracia

Si hubiera publicado este hilo en el día de ayer –aunque sí que lo escribí el llamado día de los inocentes-, algún lector despistado (despistado porque se pasara por el blog, ya que parezco ser el único que lo visita) podría haber pensando que se trataba de una broma. Pero nada más lejos de la realidad.
Porque el que las encuestas vaticinen que el grupito de Junior puede superar los cien diputados en unas elecciones generales, disputándole la victoria al Partido Popular (y habiendo fagocitado, por lo tanto, a comunistas y socialistas) es algo que debería asustar a cualquiera con un mínimo de visión objetiva de las cosas.
Mientras, en Vacongadas el llamado euscobarómetro dibuja un panorama muy parecido e igualmente abracadabrante: los epígonos de Sabino Arana serían la fuerza con más escaños en la asamblea legislativa autonómica, con Podemos soplándoles la nuca a sólo un escaño.
Que las franquicias vascas de socialistas y populares se desplomen no es extraño, dada la tibieza con que unos y otros han tratado el problema terrorista (que no ha desaparecido, por más que no maten… de momento). Pero que el p-ETA sea sobrepasado en las querencias de su electorado por unos recién llegados sí que sorprende. Hasta a ellos mismos, que señalan que la encuesta es una manipulación grosera… como si hubiera alguna encuesta que no lo sea.
Y en esa otra esquinita de España, los voceras del necionanismo también arremeten contra Junior y su tropa. Para Convergencia, son el caballo de Troya de la casta española en el proceso independentista (con lo poco que debe gustarles que les llamen casta), probablemente porque el de la coleta, quizá para no espantar a un hipotético electorado españolista, se niega a aclarar si permitirían un referéndum como el que quieren los secesionistas, al tiempo que afirma que con ellos en el gobierno de España, Cataluña no querría marcharse.
Y, para terminar, la inteligente aunque cantamañanas Pilar Rahola, que ya debe haber pasado por todo el espectro político en su peregrinar ideológico, tilda de salvapatrias a Junior. Qué lejos quedan aquellos tiempos en los que la izquierda nacional consideraba que eso de nación (no digamos ya lo de patria) era un concepto discutido y discutible…
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!

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