Incapaz de abandonar el cargo con un mínimo de dignidad, o quizá intentando hacerse simpático a los que parece que van a mandar de verdad en Vascongadas a partir de ahora, el gobierno de Pachi Nadie ha declarado que dos etarras fueron víctimas de sufrimientos injustos.
Aunque se hace difícil considerar que ningún sufrimiento que pueda experimentar un asesino miserable (como son todos los de ETA) resulte injusto, esta decisión no es más que una nueva bofetada en la cara de las verdaderas víctimas: las de los terroristas.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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