domingo, 22 de enero de 2012

Te veo...

No suelo escribir sobre cómics en este blog. De hecho, es la primera ocasión en que lo hago. Pero, para variar (y extrañamente), el tema tiene que ver con la política o, por mejor decir, con las opiniones políticas.

Desaparecidos ya los lejanos tiempos en los que los tebeos tenían correo de los lectores, ahora los cómics Marvel editados por Panini (la mayoría de los que leo) traen en la penúltima página una sección en la que Julián M. Clemente comenta algún detalle de la historia o los personajes que aparecen en el ejemplar en cuestión, o bien anticipa acontecimientos futuros. Hasta ahí, todo perfecto.

Lo que pasa es que, de vez en cuando, el interfecto hace comentarios de carácter político. A lo mejor si cojeara del pie derecho no me molestaría tanto, o quizá sí, quien sabe; pero sus comentarios tienen un inconfundible (y molesto) tufillo progre. Tres ejemplos:

  • Guerra Civil: Primera línea # 1: No recuerdo exactamente qué es lo que decía (me reboté tanto que decidí no comprar esa serie, y tampoco he comprado las Primera línea de los siguientes crossovers de la editorial), pero sí que era a propósito de los medios de comunicación. Venía a criticar a aquellos que han defendido y defienden que no está todo dicho en el 11-M, que aún hay muchos puntos oscuros en el antes, el durante y el después de los atentados. En concreto, me dio la impresión de que se refería, sin nombrarlo, a Federico Jiménez Losantos.
  • Miedo encarnado # 1: En esta ocasión trazó un paralelismo entre lo contado en el cómic y la situación que existe (según él) en Estados Unidos en la realidad, un país atenazado por la crisis económica, con un hombre bueno al frente del gobierno, pero que sin embargo es incapaz de actuar, ante la envergadura del problema, pero también al estar atado de pies y manos por una oposición irresponsable e ignorante que juega a la política de tierra quemada. Se ve que lo del cordón sanitario en España no le ha preocupado en lo más mínimo…
  • Vengadores secretos # 12: dejando aparte que obvia el hecho de que el Usagente que aparece en el cómic no es John Walker (sería difícil, puesto que Walker perdió un brazo y una pierna en Asedio), señala que el USAgente simbolizaría los valores del Tea Party republicano… alguien a quien tener miedo: mucho miedo. Trazando un paralelismo con los indignantes, equivaldría a decir que éstos son comunistas… El Tea Party es algo mucho más complejo que una sensibilidad (por emplear un término que Julián pueda enteder) dentro del Partido Republicano, aunque es indudable que desde la óptica europea, y para simplificar, pueden ser calificados como de derechas. Puestos a tener miedo, habría que tenérselo a Rodríguez cuando se definió como rojo, teniendo en cuenta lo que los rojos empezaron a hacer hace ahora ochenta años…
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!

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