En los prolegómenos de la adquisición de Twitter por parte de Elon Musk-es decir, desde que ensilló el anuncio de su intención de comprar la red social hasta que finalmente ensilló dicha compra-, saltó la noticia de que el millonario sudafricano planeaba despedir a tres cuartas partes de la plantilla.
Uno de los analistas que valoraron la noticia señaló que Musk es un
fanático de la eficiencia, y que no le gustan nada la ineficiencia y la burocracia
en las empresa.
A lo mejor por eso, pensé, es el hombre más rico del mundo.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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