Quizá sea sesgo de confirmación, pero la idea de que es la derecha la que gestiona como Dios manda lo demostraría el hecho de que es la izquierda la que nos mete en las crisis, y la derecha la que tiene que sacarnos de ellas.
Así, ante las medidas tomadas a
final de año por el desgobierno socialcomunista que tenemos la desgracia de
padecer -varias de ellas propuestas desde hace ya tiempo por el PP, y
denostadas por la izquierda-, hubo dos reacciones: el poli malo que
sería Isabel Díaz-Ayuso dijo las del barquero, al señalar que en el Madrid castizo, a eso que hace Sánchez lo llamamos engañabobos, cinco euros al mes porun voto; mientras, el poli bueno que sería Alberto Núñez Feijóo se
limitaba a señalar dos propuestas (bajar el IVA también a la carne, el pescado
y las conservas, y recuperar el descuento de veinte céntimos por litro para las
clases medias y bajas) que esperaba que el psicópata de La Moncloa aceptase lo
antes posible.
Prueba de los marxistas, desde su fundador hasta la actualidad, tienen la cara de hormigón armado la dio la ninistra del Desempleo, Egolanda, que cuando era el líder popular el que proponía la bajada del IVA lo ponía a parir y cuando es el consejo de ninistros el que lo hace lo vende como un logro.
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