lunes, 12 de diciembre de 2016

País de miserables

Con motivo del fallecimiento de Rita Barberá, en el Congreso de los Diputados se guardó un minuto de silencio en su memoria. Muestra de respeto de la que se ausentaron los de la bancada neocom, por orden expresa de su cabecilla.
Ese cabecilla no sólo no muestra arrepentimiento, sino que se jacta de su acto nauseabundo pregonando que va recibiendo felicitaciones por la calle por lo que hizo. Si asumimos que, por una vez, Junior está diciendo la verdad, la cosa es para preocuparse. No porque ese sujeto zafio y barriobajero haya descubierto las bondades de la sinceridad, sino porque sus palabras implican que España ha llegado, siquiera parcialmente, a un nivel de degradación moral absoluta.

¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!

No hay comentarios: