Los
madrileños no votaron a los neocom
como los encargados de dirigir los destinos de la Villa y Corte. Podrán decir
los del partido de los redondeles que fueron más los madrileños que estaban en
contra de que gobernara el PP que los que estaban a favor. Esto es cierto, pero
tan cierto como que fueron más los que estaban en contra de que gobernaran los
ultraizquierdistas, siquiera porque la lista encabezada por Esperanza Aguirre
fue la más votada.
Si
la juez comunista y filoterrorista es la alcaldesa del poblanchón manchego es porque la lista encabezada por el político cuyo
apellido sólo se diferencia del suyo en una letra le proporcionó los votos necesarios.
A pesar de lo cual, obtuvo los apoyos imprescindibles, pero ni uno solo más.
Esta
circunstancia –que los comunistas gobiernan gracias a los socialistas- es algo
que no conviene perder de vista. Yo no pienso hacerlo y, de momento, parece que
los grupos de la oposición en el Palacio de Comunicaciones tampoco, habida
cuenta del repaso que dieron hace un mes a los del puño y la rosa por su apoyo a los presupuestos de Doña Rojelia.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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