Me leí, si bien algo en diagonal, la entrevista que en El Mundo realizaron al asesino etarra Carnicero de Mondragón. Supuso un
verdadero esfuerzo, pero me permitió comprobar, negro sobre blanco, algo que ya
sabía: que por mucho que, de momento, hayan dejado de matar, hay un núcleo de
gente entre los terroristas que no han cambiado: mantienen los mismos objetivos
(independencia y socialismo), las mismas convicciones (sus actividades estaban
justificadas y siguen estándolo) y la misma falta absoluta de escrúpulos de
ninguna clase (el miserable no realizaba asesinatos, sino ejecuciones).
Así las cosas, no es extraño que VOX
haya anunciado que denunciará a semejante alimaña por apología del terrorismo. Quizá
lo hagan por obtener una notoriedad de la que, de momento, carecen; pero, en
cualquier caso, es una denuncia necesaria, dado que los hechos son tan graves
que no se entiende cómo el Ministerio Fiscal no ha actuado de oficio.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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