A poco de comenzar la invasión de Ucrania, el autócrata ruso puso en estado de alerta las fuerzas de disuasión del ejército ruso, lo que podría incluir un componente nuclear.
Y esto lo hizo, según él,
por las declaraciones agresivas de los miembros de la OTAN. Si se le
respondiera en el mismo grado que el empleado por él, Moscú estaría reducido a
cenizas radioactivas.
Y, como una guerra
nuclear termina, presumiblemente, cuando no queda nadie en pie, el resto del
mundo estaría probablemente igual.
хай живе україна!!!
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