Los sindicalistas de la UGT, en su corrupción, son hasta cutres. Puestos a comprar maletines de piel con cargo a fondos públicos, bien podían haberlos encargado de lujo, puesto que pagaban con dinero público que, como es bien sabido, no es de nadie. Pero no, los compraron falsificados, de una marca española… y fabricados en Asia, continente donde los malvados capitalistas se dedican a explotar a las masas trabajadoras, singularmente a los niños. Si es que…
No hay comentarios:
Publicar un comentario