Primero fueron los catalanes con su hecho diferencial. Luego siguieron los
vascos. A continuación, los gallegos. Más tarde salió el robaperas andaluz. Y ahora
se han apuntado los canarios, dando la nota (chiste fácil fácil, lo sé) con lo
de su hecho diferencial (aunque
bueno, ellos sí que lo tienen: al fin y al cabo, son un archipiélago que está a
enorme distancia del resto de España) y pretendiendo equipararlo al de Cataluña
y Vascongadas. Antes de que nos demos cuenta habremos retrocedido ciento cuarenta años, y la Gomera le declarará la guerra al Hierro…
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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