Gobernando,
los socialistas españoles nunca han sido especialmente unos lumbreras. Gestionaban
mal, robaban como descosidos, mentían como bellacos… pero, al menos, no decían
grandes tonterías.
Con
la entrada de los neocom en el Gobierno
–o con la llegada de Sin vocales a la
cúpula del partido, vaya usted a saber… o, quizá, por una conjunción de ambos
factores-, eso ha cambiado. Los suciatas
ahora, además de hacer tonterías, las dicen. ¡Y de qué manera! Porque en su
(enésimo) anuncio de presupuestos generales del Estado –recordemos que va para
dos años en la poltrona y todavía no ha logrado aprobar unos- han declarado, y
se han quedado tan pichis, que serán unos presupuestos con impacto de género (me resulta imposible no preguntarme de qué
género va a ser ese impacto) y que contemplará los sectores productivos con perspectiva de clima.
En
tiempo de rojos, además de hambre y piojos, parece que las tonterías vienen a
carretadas.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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