Esta entrada no tendría que haberse producido
nunca. Me explico. El sistema que empleo para escribir entradas en el blog es
ir seleccionando noticias, para poder dedicar cada día la entrada
correspondiente a una de ellas (a veces, si las noticias están relacionadas,
aunque sea del modo más inverosímil o alambicado, incluyo varias en la
entrada), lo que hace que, si la producción de noticias ha sido muy copiosa,
hable de un tema semanas después de que se haya producido.
Generalmente tengo noticias suficientes para ir
tirando una semana, o más. Lo cual no quiere decir, ni mucho menos, que tenga
escritas las entradas correspondientes. Salvo que me vaya a marchar a un lugar
en el que no vaya a disponer de conexión a Internet (y esto, con los móviles
actuales, es más bien complicado) ni de ordenador, la entrada la escribo la
víspera de su publicación, o quizá un par de días antes.
Las entradas en
cola las guardo en un fichero titulado, nada originalmente, Para el blog. Ese fichero lo guardo en
el stick USB en el que guardo otras
cosas importantes para mí, y en general viaja conmigo allá donde vaya a
pernoctar.
Pues bien, ayer por la mañana, cuando me dispuse a
abrir el fichero en cuestión, Word dijo que no lo encontraba. Lo busqué en la
carpeta correspondiente y no estaba allí. Usé el buscador de Windows, y
tampoco. Así que escribí esta entrada, para explicar por qué no hablo de
política, o de libros, o de fútbol.
A ver cómo me las apaño mañana…
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
P.D.: Nada más escribir esta entrada ya tenía enlaces
suficientes para el resto de la semana…
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