Algunos
votamos al Partido Popular, al menos últimamente, por aquello de elegir el mal
menor. Porque la verdad, en las medidas que toma el Gobierno actual es difícil
reconocer al que hizo oposición en los noventa y hace una década. Se ve que,
llegados al poder, sufren una especie de transustanciación socialdemócrata que
les impele a tomar medidas de lo más intervencionista.
Me estoy
refiriendo, en concreto, a la prohibición de realizar pagos en efectivo cuando
su importe supera los mil euros, con el pretexto de luchar contra el fraude
fiscal. Pero es evidente que mil euros es una cantidad demasiado pequeña como
para que suponga otra cosa que una molestia para el común de los mortales. Y a
los que quieran defraudar, lo mismo les da el límite de mil como el de cien
mil, que encontrarán la manera de hacerlo.
Lo tengo
clarísimo: si fuera estadounidense, probablemente votaría republicano, pero
sería lo que allí llaman libertario.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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