Cuando
hace tiempo Esperanza Aguirre detuvo su coche en el carril bus de la Gran Vía
madrileña para sacar dinero de un cajero automático, (casi) todo el mundo la
puso a parir, fue rodeada por los municipales, perseguida y vilipendiada.
Sin
embargo, hace poco ha sido Triple S
la que ha hecho lo propio para ir a comprar unos grandes almacenes, y lo ha
hecho con toda la pachorra del mundo: ni acoso policial, ni persecución por las
calles de Madrid, ni chorreo de críticas desde la generalidad de los medios de
comunicación.
Doblevarismo
en versión de bolsillo, vamos…
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
¡¡¡FELIZ NAVIDAD!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario