Cuando empecé a escribir en este blog de manera continuada, Nicolas Sarkozy ganó las elecciones a la presidencia de Francia. Entonces vaticiné que podría conseguir lo que hasta entonces nadie había logrado (quizá ni intentado) en la Quinta República, esto es, encadenar tres mandatos consecutivos. No podía haber estado más equivocado, porque cinco años después era descabalgado por un sosainas como Hollande, que lo único que tenía en común con el pequeño Nicolás era su éxito con lar mujeres.
Y ahora, cuando intentaba el retorno al palacio del Elíseo, Sarkozy ha sido descabalgado de nuevo, esta vez en las primarias de su partido. Veremos qué hace su sucesor, porque aventuro –aunque ya se ve lo que valgo como profeta- que la izquierda se pegará el batacazo y que, forzados a elegir entre la derecha y la extrema derecha, los franceses harán como en el segundo mandato de Chirac y votarán a la derecha aunque sea tapándose las narices.
Eso, salvo que decidan suicidarse como país, y de paso a Europa con ellos.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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