miércoles, 9 de marzo de 2016

Cualquier excusa es buena

Un problema que ha tenido tradicionalmente la izquierda desde la instauración de la democracia –se diga lo que se diga, la Segunda República no fue una verdadera democracia, y la cosa fue empeorando en los seis años que duró- ha sido la tendencia a confundir lo público con lo privado. No es que a la derecha no le haya ocurrido lo mismo, pero es que ha gobernado menos tiempo.
Y este problema le ocurre a toda la izquierda, a la de siempre y a la nueva. No hay más que ver al regidor zaragozano, neocom él, que ha cargado el importe de su gomina al presupuesto del Ayuntamiento. Interpelado sobre el particular, ha justificado su actuación diciendo que es para estar presentable.
O sea, sobre cutre, impresentable.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!

No hay comentarios: