Los hay que no aprenden de la Historia. Probablemente, porque la desconocen.
Una de las enseñanzas de la
historia es que, cada vez que una presunta élite ha azuzado al populacho para
derribar el poder establecido, y ocupar esa élite el poder a continuación, la
cosa les ha salido rana.
Pasó en Francia a finales del
XVIII, pasó en Rusia a principios del XX, y está pasando en Cataluña. Polluelo
cebó a los ierreceos, éstos a los Clicks Unidos de Playmobil,
y estos últimos se ceban solos. Pero todos, absolutamente todos, han criticado
a los que les cebaron por ser demasiado blandos, demasiado complacientes
con la opresora España.
Y ha vuelto a suceder con motivo
del acoso a la familia del niño de Canet de Mar, familia que pide nada más
-¡nada menos!- que el cumplimiento de la Ley y de las resoluciones judiciales.
El consejo regional de gobierno apoyó las manifestaciones que reclaman una
escuela exclusivamente en catalán…
…y en esas manifestaciones resulta que al consejero regional de (des) educación le han tachado de colaboracionista.
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