viernes, 30 de octubre de 2015

Rojelieces

Una cosa que hay que reconocerle a doña Rojelia es que es leal para con los suyos, es decir, neocom, antisistema, perroflautas y demás ralea de semejante catadura. Lo malo es que parece gobernar únicamente para ellos, cuando debería, ya que ocupa el sillón de alcaldesa a pesar de no haber sido la candidata más votada, gobernar para todos los madrileños, no sólo aquellos que le ríen las gracias (desgracias, para los madrileños que la tenemos que sufrir).
Así, y en relación con los jetas que se dedican a ocupar edificios, de momento ha tenido dos detallitos que no son sino regalos envenenados para los que vengan después de ella: les premiará en la adjudicación de vivienda pública y a los del Patio Maravillas les deja elegir (¡por catálogo!) su nueva sede.
Y uno se está más de un cuarto de siglo pagando una hipoteca todos los meses para esto…
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!

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