viernes, 5 de febrero de 2016

Pinza y contrapinza

El problema, por así llamarlo, de escribir las entradas el mismo día en que se produce la noticia, o casi, es que las opiniones que recojo en este blog son, casi única y exclusivamente, las mías. No tengo tiempo de leer crónicas o columnas de opinión sobre el tema, ni de escuchar la radio o ver la tele para recoger las opiniones de gente con más predicamento que yo.
Ojo, que no quiero con ello decir que, cuando tengo el tiempo suficiente, lo que escribo en el blog se limite a ser un batiburrillo de lo que dicen o escriben otros. No. Pero es indudable que todo el mundo, y yo el primero, puede verse influido –a favor o en contra, para apoyar o rechazar- por lo que los demás dicen o piensan de algo.
Dicho lo cual, entro en harina para referirme a los dos bloques que se han formado en el Congreso. Uno de ellos, al menos, no es de amigos, sino de confluencia de rechazos, en la línea de aquello de que el enemigo de mi enemigo es mi aliado circunstancial.
Lanzado Sanchez a la carrera para intentar ser investido presidente del Gobierno, parece que, de momento, cuenta con el apoyo de Ciudadanos. En principio parecería lógico que éste fuese el apoyo que buscase con preferencia, ya que si se aliara con los neocom, perdería votos a derecha e izquierda: los moderados dejarían de votarle por su apoyo a la extrema izquierda, y los radicales votarían directamente a esa extrema izquierda, buscando así eliminar intermediarios (o, como suele decirse, entre un producto genuino y una copia, el votante tiende a optar por el primero).
En contra de su propósito de tener un mes para intentar concitar apoyos se han significado populares y neocom. Los primeros, porque lógicamente no quieren un gobierno del PSOE, y acortar los plazos significa darle menos ocasiones de lograrlo; los segundos, por un digamos síndrome de amante despechado, en plan si no es conmigo, no será con nadie, o quizá vas a darte cuenta de que soy el único que puede darte lo que necesitas.
Frente a esta oposición, el PSOE ha contado con el apoyo de Ciudadanos. El partido naranja quizá lo haya hecho porque el PSOE, a diferencia del PP, se ha declarado dispuesto a (intentar) alcanzar la investidura; quizá lo haya hecho porque, como casi todos en España, tiene vergüenza de declararse de o apoyar a la derecha; o, finalmente, quizá lo haya hecho porque las últimas encuestas vaticinan un descenso en la intención de voto a su favor, y por tanto no van a verse de nuevo en otra ocasión como ésta, al menos a corto plazo.
O quizá, en fin, sea una mezcla de las tres cosas. En proporciones variables, según a quién preguntes.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!

No hay comentarios: