En general, los miembros del desgobierno socialcomunista que tenemos la desgracia de padecer son confusos, profusos y difusos en su expresión verbal (el caso de la hasta hace poco portacoz del consejo de ninistros era paradigmático), hay ocasiones en las que hablan de modo bastante claro.
Lo que ocurre es que en tales
casos se les suele entender demasiado bien; dado su nivel de inepcia, que corre
parejo con el de su estulticia y su falta galopante de empatía, lo habitual es
que la gente se les eche encima (verbalmente). En tales casos reculan, dicen
que era sólo una idea o que se les entendió mal. Cosa esta última extraña, para
una vez que se les entiende todo.
Fue el caso del ninistro
de Inseguridad Social a principios de este mes, cuando reconoció que entre los
planes del consejo de ninistros estaba el de recortar las pensiones de
los llamados baby boomers. Según el interfecto, tendrían la opción de cobrar
un poco menos o trabajar un poco más (dicen los que viven a cuerpo de rey
sin dar un palo al agua).
Naturalmente, le cayeron palos por todas partes. Nada sorprendentemente, dijo que se le entendió mal y que no tuvo su mejor día.
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