Cuando la izquierda no está en el poder, abomina del mercado
(entendiendo por tal el sentido que tiene en una economía liberal capitalista) y
de sus leyes, y critica los modos de los capitalistas. Cuando alcanza el
poder, sigue esos modos que antes criticaba; en cuanto a las leyes del mercado,
las sigue si quiere sobrevivir (ejemplo paradigmático sería la China comunista a
partir de los años setenta/ochenta del siglo pasado), o precipita a su país en la
ruina si se las salta a la torera (las tres ces –Cuba, Camboya y la Corea comunista-
son los ejemplos que primero me vienen a la cabeza).
Centrándonos en los gobiernos municipales neocom en España, tenemos ejemplos
a cascoporro de lo que he señalado en el párrafo anterior:
- Se coloca
en puestos de responsabilidad –y de pingües retribuciones- a sujetos cuya única
cualificación reside en compartir ideología con el equipo que rige el
consistorio.
- Se dispara la prima de riesgo en un 60% en un
mes.
- Se derrocha
el superávit (ya se sabe que estos ateos no conocen el sacrosanto temor al
déficit… público, que el privado ya sabemos que se las apañan para evitarlo)
para financiar una explosión de gasto que hará
que el saldo positivo del año que viene sea muy reducido. Vamos, como
lo de crecimiento negativo.
- Se paralizan tres docenas de proyectos turísticos en Barcelona,
una ciudad que tiene precisamente en el turismo una de sus fuentes de ingresos
más importantes (si esto lo leyera mi hermano, le diría ¿ves cómo se marca
uno un farol?), mientras la bruja Piruja se gasta en un viaje por Alemania
(¡qué gran país!) más de lo que gano yo en un año (y no estoy mal
pagado, precisamente)… en bruto.
- Doña Rojelia se va a Suiza (se ve que a los
neocom les tiran las tierras germánicas, quizá porque el padre de la
ideología paleocom nació allí) a debatir con alcaldes de ciudades de Níger, Ghana y El
Salvador; países que, sin pretender despreciarles, están por debajo
de nosotros en todos los indicadores económicos y sociales… de momento.
- Se gasta
trescientos cincuenta mil euros en reformar despachos y salones de Cibeles. El
propio consejo de gobierno reconoce que fue la alcaldesa la que manifestó su
deseo de hacer estas obras (como no sea para dar trabajo al estudio de arquitectura
de su esposo, del cual todavía no se sabe que haya indemnizado a sus trabajadores).
- Los gastos
urbanísitcos de la ex abogada ex comunista (según ella) y ex juez ya superan el coste de la sede actual del Ayuntamiento
de Madrid.
- El partido
que la sostiene (no, no el PSOE; sino el otro) otorga catorce millones de euros a la asociación
que dirigía su número dos. Sin duda, porque se lo merecía….
- Declaran
(veremos en qué queda esa declaración, porque mucho me temo que seguirá el
camino de los sueldos bajos, los no coches oficiales y demás pamemas populistas)
que no podrán quedarse con regalos por encima de ciento cincuenta
euros al año.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario