En todas partes cuecen habas

Últimamente, y bien que se encarga el gremio progre del resaltarlo, no hacen más que aflorar casos de corrupción que afectan a dirigentes del Partido Popular. Si pudiera (y quisiera, que no quiero) argumentar con quienes afirman que el Partido Popular es un partido corrupto (hay quienes incluso propugnan su ilegalización), les señalaría una serie de hechos:

• El Partido Popular no es el único partido con causas abiertas por corrupción. Quizá sí lo sea por número de causas abiertas, pero no por importe. En eso, el Partido Socialista gana de calle con un solo caso, el de los EREs fraudulentos (y si nos remontamos al Quinto Centenario, Filesa y Malesa, la reprivatización de Rumasa, el caso Roldán y demás, para qué vamos a contar).
• El Partido Popular ha aprobado más normas contra la corrupción que el PSOE. Admitamos que lo ha hecho obligado por las circunstancias, pero lo ha hecho. Y el que los jueces y fiscales estén actuando sin (aparentes) cortapisas dice del respeto popular a la independencia judicial cosas más favorables que aquel pero ¿es que a estos jueces nadie les dice lo que tienen que hacer? de Felipe González.
• Ningún miembro del Partido Popular, que se sepa, se ha dedicado todavía a asaltar supermercados o a ocupar fincas privadas. Los comunistas (versión paleoagrocomunismo), sí.
• Los populares, que se sepa, tampoco han apoyado activamente las veleidades secesionistas de según qué nacionalidades histéricas: los socialistas (por no hablar de los comunistas) sí, desde el gobierno (nacional y regional) y desde fuera de él.
• Los populares no tienen un conglomerado mediático (ni varios) dedicado a jalear los errores del contrario y minimizar los propios; lo que, unido a su inveterado talante maricomplejines, explica lo que les está pasando. Porque no es que se corrompan más que los otros, ni que intenten blindar a sus dirigentes corruptos (o corrompidos) y los socialistas no, ni que tengan miedo de éstos que puedan tirar de la manta y en el PSOE no.

En resumen: no es y tú más, sino y tú también… y, además, también más. No es que en el Partido Popular sean menos honrados, es que son más gilipoyas.

¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!