La
progresía ha hecho de su pretendida defensa de la igualdad entre hombres y
mujeres una cruzada en la que, en realidad, lo que se produce es una
discriminación de sesgo contrario a la que, según ellos, ha tenido lugar a lo
largo de la Historia.
Esto
es, se favorece a las mujeres frente a los hombres. Eso es lo que los
contrarios a ese tipo de actitud denominamos hembrismo, equivalente al tan denostado machismo pero de signo contrario. Y eso lo hacen sacando normas
inconstitucionales, como la sedicente ley
de violencia de género (no me cansaré de decirlo, las personas no tienen
género, tienen sexo) que contraviene la Constitución al menos en dos aspectos:
por tratar de manera diferente a las personas en función de su sexo, y por
establecer la presunción de culpabilidad en el caso de los varones.
Ahora,
el gobierno de Sin vocales pretende
dar un paso más y cambiar el Código penal de modo que, en una relación sexual (sexual, gaznápiros, y no general), si la mujer no dice explícitamente sí será considerada violación.
No
voy a citar aquí los chascarrillos que se han producido, con multitud de
propuestas de formularios a rellenar antes de consumar el asunto (para cuando terminen, ya se le habrá pasado las ganas a
uno, al otro o a los dos… o más, si hablamos de una orgía). Pero plantearé
otras cuestiones que no he visto recogidas en ninguna otra parte (ojo, no digo
que no se hayan planteado, sino que yo no las he visto). Por ejemplo, ¿cómo ha
de manifestarse ese sí? ¿Bastará,
quizá, con un simple movimiento vertical de la cabeza? Salvo, naturalmente, en
aquellas culturas en que tal gesto equivalga al no, y el sí se gesticule
moviendo la cabeza de lado a lado. ¿O levantar el pulgar, o juntar el índice y
el pulgar formando un círculo, manteniendo rectos los otros tres dedos? Y si es
necesario producir sonidos, ¿será suficiente un gruñido, o decir ajá, o es preceptivo decir con todas las
letras (las dos) sí? Y las mudas,
¿qué hacemos con las mudas, señorías? ¿Y si, además de mudas, son tetrapléjicas,
y no sólo consienten, sino que hasta desean la relación?
Y
mientras, los varones, hetero u homosexuales, sin saber a partir de cuándo es sí cuando se enfrentan al tema de si hay
o no hay tema…
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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