El
dicho de nunca deja la oportunidad de
dejar pasar la oportunidad se puede aplicar, con una gran probabilidad de
resultar acertado, a todos y cada uno de los progres de la piel de toro. Parecen incapaces de mantener la boca
cerrada –o, en términos más modernos, el teclado quieto- y, así, evitar soltar
alguna de esas tonterías que acostumbran.
Hace
casi un mes exacto fue ese asesor económico de apellido premonitorio (llevando
el de Monedero, ¿qué otra cosa iba a
ser el hombre?) el que, tras la final del campeonato del mundo de fútbol,
celebrado en Rusia, volvió a (ahí va otro dicho que se puede aplicar a sus
conmilitones) evitar quedarse callado y así dejarnos con la duda de si habría
adquirido algo de seso: escribió, y despejó la incertidumbre en dirección a la
estulticia.
En
concreto, su tuit decía Los negros han
ganado el mundial de fútbol. Podría Europa salvar a los que vienen en pateras
aunque sea pensando que alguno seguro ese es un genio del fútbol.
Vamos
a dejar de lado el hecho de que, aparentemente, la redacción deja bastante que
desear (¿qué demonios quiere decir alguno
seguro ese es?), y pasemos al hecho de que hasta en sus propias filas le
han criticado por racista. Que no digo que el comentario lo sea ni que lo deje
de ser, que es que de un tiempo a esta parte parece que algunos tienen permanentemente la epidermis en carne viva; simplemente, que estos progres se suben a cualquier tranvía que pasa
por delante de ellos, sin pararse a mirar en qué dirección va.
Lo
dicho: tonto del culo con ataques epilépticos, que dice mi padre.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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