Por
mucho que se pretendan presentar con un barniz moderno y actual, los neocom son exactamente lo mismo que sus
correligionarios menos pulidos (los paleocom):
unos totalitaristas de tomo y lomo.
Están
decididos a regular todos y cada uno de los aspectos de la vida de aquellos que
gobiernen. Y, aunque en algunos casos el resultado podría ser favorable o
beneficioso, hay que dejar las cosas a la iniciativa particular. Es el caso de
la facción valenciana, que pretende que todos los españoles sean donantes de órganos por Ley. Algo que no se les ha ocurrido ni a cubanos, ni a venezolanos,
ni siquiera a norcoreanos.
Máxime
cuando España está, precisamente, a la vanguardia de la donación de órganos.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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