Adquirí este libro por recomendación de la hermana del autor, que es amiga mía. Quizá por eso voy a hacer un comentario un poco menos generalista que de costumbre:
- Lo bueno:
- El pulso narrativo: la tensión está bien dosificada, y aunque algunas cosas pueden preverse también hay varias sorpresas. El final abierto es sencillamente estremecedor. No diré yo que estemos ante el Stephen King español (el de Maine es único), pero sí ante alguien a quien quizá merezca la pena seguir.
- La escena del río: comprendo que la mujer del autor se pensara el enviarle a dormir al sofá, porque es dura de narices. Hay que estar muy enfermo para hacer algo así (me refiero al personaje, no al autor ni a su mujer).
- La trama: aunque en algunos aspectos me recuerda a Verano de seducción, del antedicho King, tiene las suficientes diferencias como para no ser un pastiche.
- Lo malo:
- Errores ortográficos: supongo que es achacable al corrector automático de los ordenadores, que te juega estas malas pasadas (muchos porque en lugar de por qué).
- Incoherencias: en una ocasión biblia aparece con minúsculas (cuando debería ser en mayúsculas, pues es el título de una obra), y en otra se dice La Biblia (no veo la necesidad de capitalizar el artículo).
- La puntuación: esto quizá sea una manía personal, pero me parece que hay muchas comas donde no debería haberlas, y viceversa.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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