domingo, 24 de abril de 2016

La hiena no pierde sus rayas

Pase lo que pase y digan lo que digan, los sucesivos p-ETAs son eso, formaciones políticas dirigidos por los terroristas vascos, cuando no integrados directamente por ellos. Lo prueba, sobre todo, el hecho de que se nieguen sistemáticamente a condenar los crímenes (de lesa humanidad) perpetrados por el grupo del hacha y la serpiente.
Sin embargo, hay gente en Vascongadas que les vota. No los bastantes, todavía, para gobernar en solitario en toda la comunidad autónoma, y menos aún en Navarra (aunque ya estamos teniendo muestras palmarias de cómo se las gastan incluso gobernando en minoría), pero los indicios hacen temer que todo se andará.
De momento, gobiernan en bastantes poblaciones. La capital guipuzcoana, sin ir más lejos, lo que lleva aparejado el control de las celebraciones de la capitalidad europea de la cultura. No teniendo que dar cuentas a nadie, pueden expresarse como les venga en gana, y bien que lo hacen al calificar el terrorismo etarra como un fenómeno político, militar y cultural.
Ante semejante barbaridad, el Ministerio de Cultura reaccionó con prontitud, pero con demasiada suavidad, ya que pidió que se ponga cuidado en las palabras al tratar aspectos como el terrorismo en España, con el fin de no herir ninguna sensibilidad.
Suponiendo que los terroristas hubieran pensado en la sensibilidad de los demás, herirla sería precisamente lo que buscarían.

¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!

No hay comentarios: