Sólo
existe una región en toda España en la que, desde el establecimiento de las
comunidades autónomas, no se haya producido nunca la alternancia en el poder. Esa
región es Andalucía, y el partido en el poder siempre ha sido el socialista
(sólo o en compañía de otros), que ha ejercido su férula al Sur de
Despeñaperros durante más tiempo del que Francisco Franco gobernó España.
Fruto
de tan prolongada estancia en el poder es una corrupción cuyo hedor supera con
mucho al del resto del país, Cataluña incluida (que ya es decir). Da igual si
se mira a la compra y subasta de medicamentos, a la colocación irregular de miles de personas vía un sedicente fondo de formación o a agujeros de millar y medio de millones de euros (casi un cuarto de billón, con be de barbaridad,
bestialidad y botín, de las antiguas pesetas).
Pero
claro, es la derecha la que es corrupta y ladrona… y Franco el culpable de todo lo malo (malo desde el punto de vista retroprogre, por supuesto).
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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