miércoles, 14 de marzo de 2018

Stephen Hawking

En el día de su muerte, estoy convencido de que prácticamente todos las personas normales que hubieran oído hablar de él coincidirían en tres puntos:
  1. Pensarían que se merecía el Premio Nobel (yo también).
  2. Se extrañarían de que no se lo hubieran concedido (yo, relativamente, si tenemos en cuenta que a Einstein se lo dieron por el estudio del efecto fotoeléctrico y no por la teoría de la relatividad).
  3. No sabrían a qué se dedicaba exactamente (astrofísica), más allá de un vago era un científico.


En cualquier caso, como he visto que ha puesto un pariente mío: Hawking no creía en Dios… vaya sorpresa que se habrá llevado al encontrarse hoy ante Él.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
P.D.: Sí, ya sé que la imagen que he puesto no es de Hawking, sino de Einstein...

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