Desearía
de verdad tener algún conocido psiquiatra (o psicólogo: la verdad es que nunca
me aclaro con la diferencia entre unos y otros, por más que me lo hayan
explicado más de una vez) que me sacara de dudas sobre el rasgo dominante de la
personalidad de Pdr Snchz. Se me ofrecen dos alternativas: o bien es un
soberbio, o bien se sabe inferior (es decir, no tiene complejo de inferioridad,
sino conocimiento de la misma) e intenta ocultarlo con esa actitud prepotente,
chulesca, de matasiete de mala muerte.
Lo
que no ofrece ninguna duda es la desfachatez, el descaro, la desvergüenza, la
cara, más que de hormigón armado, adamantina del personaje. Después de criticar
-como hizo toda la izmierda- hace casi una década la actitud del
gobierno Rajoy ante el desastre causado por la nefasta gestión de Rodríguez y
el ojituerto Solbes, y de calificar de rescate lo que no lo fue en
ningún caso, ahora admite que no tendrá ningún reparo en pedir el rescate en Septiembre.
Este
hijo de mil padres lleva tanto tiempo toreando a tanta gente que se debe creer
capaz de torear también a las instituciones comunitarias. Veremos si éstas, por
fin, le ponen en su sitio. Que es el estercolero de la Historia, con sus
admirados Varufakis (o como se escriba), Chávez y Castro.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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