Que
los medios públicos de comunicación, siendo España una partitocracia, muestren
un cierto sesgo ideológico según el gobierno de turno sería algo asumido… si se
produjera, especialmente en el caso de Radio Televisión Española.
Digo
esto porque (vale, soy de derechas y ya aparecerá alguien de izquierdas
diciéndome “anda, tú de qué vas”) cuando ha gobernado el PP, RTVE ha oscilado
entre imparcial y rosada (roja pero poco), aunque a los rojeras les molestase que
se tirase de ironía (contra ellos) al dar las noticias (Urdaci, creo que era el
blanco de sus críticas). Porque ¿habría permitido la izquierda un informativo
como el de La 2 que presentaba el amiguete de Lorenzo Milá, de frente despejada
y cuyo nombre no recuerdo, en las postrimerías del aznarato? Un informativo en sentido contrario, quiero decir.
Como
el ente está en general trufado de rojos, rojetes y rojeras, siempre ha tirado
más bien hacia la izquierda. Cuando ha gobernado el PSOE la cosa ha sido ya por
demás. Con Zapatitos, Lorenzo Milá
comparó directamente al PP con la ETA, y todavía no he oído que haya pedido
disculpas. Ahora que han colocado a la momia de Rosa María Mateo al frente del
tinglado, y con los neocom tirando de
los hilos de la marioneta, la audiencia de los informativos ha caído en picado.
Tanto, que han decidido gastarse más dinero en contratar a un consultor para arreglar los pésimos
datos de audiencia.
Mientras
tanto, van y contratan a una presunta cómica más fea que pegar a un padre con
un calcetín sudado y con menos gracia que yo (que ya es decir) para que
presente un programa que, ni sé de qué va, ni pienso ver aunque me pagasen por
ello.
Como
he dicho en el título: yo me ofrezco gratis para arreglar el desaguisado. El diagnóstico
ya lo he hecho, y el remedio está claro: cortar por lo sano…
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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