Si
ayer hablaba de que dctr Snchz no se
ponía al aparato porque estaba ocupado, hoy toca decir que debía ser porque
estaba reservando billetes, ya que al día siguiente se plantó por sorpresa en
Barcelona.
Al
menos, tuvo tiempo de echar una carta dirigida a Chistorra, exigiéndole que condenase la violencia. Mal podría
hacerlo, teniendo en cuenta que ha sido él mismo quien los ha azuzado.
Luego,
huyendo de la prensa (el que reclamaba transparencia
huye de las entrevistas no preparadas como de un nublado) se fue a un
hospital, a hacer un publirreportaje visitando a los policías heridos en el problema de orden público que asola
Cataluña. Sólo que, como de costumbre, se pasó de frenada y le salió el tiro por la culata, porque los trabajadores del hospital le abuchearon y reclamaron
a gritos la libertad de los políticos presos.
Y
por otra parte, ¿de dónde han salido estos violentos? Pues de unos sitios
llamados casas de jóvenes y clubs de la infancia que, regados con millonarias subvenciones estatales, ofrecen ocio y entretenimiento
nacionalista.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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