No
es que tuviera demasiadas dudas de la postura de la cúpula neocom en relación con el golpe de Estado en Cataluña. La izquierda
española en general, tanto más cuanto más a la izquierda, nunca ha sentido el
menor aprecio por la Patria ni por su historia; probablemente, colijo mientras
escribo, porque han pintado muy poco en la misma, y nunca para bien. Como
muestra, el hecho de que en la (última) guerra civil, al Viva España de los sublevados oponían vivas al país que les proporcionaba los cuartos (es un decir,
porque bien que ese país arrambló con las reservas de oro del Banco de España);
es decir, no recuerdo ahora bien cuál de las dos, Viva Rusia o Viva la Unión
Soviética. Probablemente el primero, el segundo es demasiado largo.
Ocho
décadas después, hay cosas que no cambian. Cuando la Fiscalía ordena investigar y, en el caso de que no colaboren, detener a los alcaldes del butifarrendum II, los neocom se unen a separatistas y
p-etarras para pedir explicaciones al Fiscal General del Estado. Y no sólo eso:
Junior ha alertado a sus diputados de
que España se encamina hacia un estado de excepción que, según él, está siendo
creado por el PP.
Es
decir, la culpa no es de los golpistas por actuar, sino del Gobierno por
reaccionar (poco, mal y tarde, pero reaccionar). Manda huevos.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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