El
catalán debe ser una lengua abstrusa, llena de falsos amigos que hacen que cuando sus hablantes emplean una
palabra o expresión, le den un significado diametralmente opuesto al que
tendrían en español.
Así,
cuando dicen España nos roba, quieren
decir que están saqueando España; cuando dicen inmersión lingüística, quieren decir ahogamiento de los
hispanoparlantes; cuando dicen países
catalanes o corona catalanoaragonesa,
hacen referencia a algo que nunca existió más que en las mentes calenturientas
de unos cuantos orates; cuando presentan la guerra de sucesión española de
principios del siglo XVIII como una guerra de independencia de Cataluña,
quieren decir que apoyaron al candidato finalmente derrotado; cuando dicen catalanes, quieren decir aquellos que
piensan como ellos; cuando dicen no
politicemos los atentados, quieren decir que ellos van a intentar sacar
rédito político hasta de los muertos; y cuando, en fin, dicen que golpe de Estado sería prohibir las urnas el uno de Octubre, quieren decir que ellos se pasan la legalidad regional,
nacional e internacional por el escroto.
¿Clarinete?
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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