sábado, 9 de septiembre de 2017

Donde dije digo ya no sé lo que dije

Ha querido la casualidad que las noticias aparecidas a mediados del mes pasado sean comentadas un par de días después del golpe de Estado perpetrado por los secesionistas catalanes.
Allá por el quince de Agosto saltaba la noticia de que el PP descartaba definitivamente aplicar el artículo 155 de la Constitución en Cataluña. Dejando aparte la prudencia o no de descartar la aplicación del precepto, lo que nunca se debe hacer en una confrontación es decirle al enemigo –y los secesionistas (entonces y golpistas ahora) catalanes lo son- lo que vas a hacer y, menos aún, lo que no harás de ninguna de las maneras. Es algo que enseñan en primero de estrategia.
Prueba de lo erróneo de la decisión fue que el ministro Méndez de Vigo tuvo que aclarar enseguida que el Gobierno estaba tranquilo y estudiaba todas las vías legales en Cataluña (hasta que no se demuestre lo contrario, la Constitución es una Ley, y sus artículos entrarían dentro de esas vías legales); que el PSOE sacara pecho porque el PP se olvidara del artículo de marras, añadiendo que les cayeron chuzos de punta por decir que había que renunciar a aplicarlo; y que el portavoz del grupo popular en el Congreso, Rafael Hernando, tuviera que señalar (menos de dos días después de la manifestación inicial) que no estaba descartada la aplicación del precepto constitucional, pero que lo tenía que decidir el Gobierno.
Lo dicho: estacazo y tentetieso, y a otra cosa, mariposa.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!

No hay comentarios: