Hace
diez días, el bleferóptico con sobrepeso amenazaba a Sin vocales con reventar la legislatura por el acuerdo que suciolistos y pomelos
habían alcanzado para votar a favor de la prórroga del estado de alarma. Hace apenas
tres, los ierreceos cambiaban de opinión (o reculaban) y valoraban la abstención si el Estado cumplía y llegaban a un acuerdo para lo que
llaman cogobernanza, que no es otra cosa que una especie de mando
compartido con el consejo de gobierno regional catalán para gestionar las
siguientes fases de la desescalada.
Mi
impresión es que, en esta negociación, ambas partes van de farol, al menos
parcialmente; y quizá más los catalanes que los socialistas. Los ierreceos
saben que no van a tener mejor interlocutor en Madrid que dctr Snchz
-salvo, quizá, el Chepas-, un individuo que carece de principios y de
escrúpulos y que está dispuesto a llegar (casi) hasta donde sea con tal de
permanecer un poco más de tiempo con su antifonario pegado al asiento de
presidente del consejo de ninistros.
Pierre
Nodoyuna
debería saber esto. Pero también debe saber que -o, al menos, eso espero- hay
determinadas líneas rojas que los pomelos, por muy desesperados que
estén -y que Arrimadas se fíe, o diga hacerlo, de un individuo tan poco de fiar
como el presidente del desgobierno indica que están muy desesperados-, nunca
cruzarían, por lo que, salvo que haya visto la luz (cosa dudosa, la verdad), no va a tener mejores cómplices en la destrucción de España que los golpistas catalanes.
Y mientras, en medio y sufriendo las consecuencias, estamos los españoles...
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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