Cuanto
más se va sabiendo de la (no) gestión por el desgobierno socialcomunista de la
crisis provocada por la pandemia del Covid-19, tanto más cierto se vuelve la afirmación
con la que cierro (no recuerdo ya desde cuándo, puesto que mi costumbre cuando
escribo una entrada es no revisar las anteriores) esta serie.
Y
es que hace una semana se supo que al mando policial cesado por recomendar en
Enero el uso de mascarillas sus superiores le obligaron a quitar del informe
del 21 de Enero que el coronavirus era potencialmente mortal. Ergo alguien,
además de Iker Iglesias, Pablo Motos y Francisco Rivera, dijo que se nos venía
encima una buena. Ergo, contradiciendo (contradizcando, que diría
alguno) a los apologetas del desgobierno, la catástrofe era previsible (y, por
lo tanto, quizá evitable).
Por
ello, y por mucho más…
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