La llamada economía sumergida no existe, diría yo, por amor al arte. Existe porque es el único medio que tiene de sobrevivir en un entorno hostil. En un entorno más favorable, disminuye. Por eso hay economía sumergida y mercado negro en las economías controladas por el Estado (antes la Unión Soviética, hoy Cuba y, probablemente, Venezuela).
En un entorno más doméstico, la
crudeza de los datos demuestra lo que callan suciolistos y neocom:
que el fraude fiscal es un cuarenta y cuatro por ciento menor en aquellas comunidades
autónomas que tienen un menor nivel impositivo, y que Madrid recauda mil seiscientos millones de euros más tras reducir su economía sumergida a golpe de
rebajas tributarias.
Es la economía…
No hay comentarios:
Publicar un comentario