No hace demasiado decía que a mí los políticos nunca me decepcionan demasiado -ni siquiera los de mi cuerda-, porque nunca espero demasiado de ellos -ni siquiera de los de mi cuerda-… además de que -y esto no lo dije-, si son de mi cuerda tiendo a disculparlos.
Hay, sin embargo, cosas que no son disculpable,
cosas que decepcionan profundamente. Como el hecho de que el alcalde de Badalona,
el popular Javier García-Albiol, haya parecido abrazar sin reparos los postulados lingüísticos separatistas, proponiendo y aprobando -recordemos que
tiene mayoría absoluta, así que la responsabilidad es toda suya- una moción en
la que asegura que el catalán es la lengua propia de Cataluña.
Postura en la que coincide con el sedicente y
sedicioso Pacto Nacional por la Lengua, un conjunto de medidas
impulsadas por el consejo regional de gobierno, los partidos socialistas,
separatistas y de extrema izquierda y organizaciones como Òmnium, la ANC y
Plataforma por la Lengua para imponer el catalán y erradicar el español de la
vida pública en la región catalana.
No era esto, desde luego que no.
No hay comentarios:
Publicar un comentario